Benagalbón

Sobre Benagalbón

A tan solo 5 kilómetros del Mediterráneo, este pequeño núcleo urbano conserva la esencia más auténtica de la Axarquía malagueña.

Atravesar las calles empedradas de Benagalbón es como dar un paso atrás en el tiempo. Este pequeño núcleo, el más singular de los cuatro que conforman el municipio de Rincón de la Victoria, atesora entre sus casas encaladas y sus empinadas callejuelas el legado histórico y cultural más valioso de toda la zona.

A pesar de ser el núcleo menos poblado del municipio rinconero, Benagalbón compensa su tamaño con una riqueza cultural extraordinaria. Su origen se remonta al siglo XI, cuando fue fundado posiblemente por una tribu bereber durante las invasiones norteafricanas, cuyo nombre dio identidad tanto a la localidad como al municipio que se crearía siglos después.

Tesoros Patrimoniales

El Museo de Artes Populares es quizás su joya más preciada. Ubicado en una tradicional casa labriega, este espacio museístico está dividido en dos áreas claramente diferenciadas: una dedicada a la vivienda tradicional y otra a los enseres y aperos de labranza típicos de la zona. Lo más destacable es que casi todas las piezas expuestas han sido donadas por los propios vecinos, manteniendo viva la memoria colectiva de generaciones enteras. Ahora mismo se encuentra pendiente de su re-apertura al público, tras una renovación.

La Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria representa otro punto de interés imprescindible. Construida en el siglo XVI, es el templo más antiguo de todo el municipio y destaca por sus extraordinarios murales interiores, obra del artista Francisco Hernández, que transportan al visitante a otra época.

Para los amantes de la tradición gastronómica, la almazara tradicional de Benagalbón ofrece la posibilidad de conocer de primera mano el proceso de elaboración del aceite de oliva virgen prensado en frío, todo un emblema de la gastronomía local. Este «oro líquido», producido siguiendo métodos tradicionales, es considerado uno de los productos gourmet más exclusivos de la comarca.

Entre Tradición y Naturaleza

El Centro de Estudios del Folclore Malagueño supone otra parada obligatoria en cualquier visita a Benagalbón. Este espacio se ha convertido en referente para la conservación y difusión de las tradiciones musicales de la provincia, con especial atención al legendario cante de los verdiales, considerado uno de los fandangos más antiguos de Andalucía.

Para quienes prefieren la naturaleza, las rutas de montaña que parten desde Benagalbón ofrecen senderos bien señalizados que permiten disfrutar de espectaculares vistas panorámicas de la costa mediterránea y los montes de la Axarquía. Rutas como la del Arroyo Granadillas o la del Cerro Benagalbón son ideales tanto para senderistas experimentados como para familias que buscan una jornada al aire libre.

Ferias y Fiestas

El calendario festivo de Benagalbón es otro de sus grandes atractivos. Las fiestas en honor a La Candelaria, que se celebran cada 2 de febrero, transforman el pueblo en un hervidero de actividad, con procesiones, verbenas y eventos gastronómicos que atraen a visitantes de toda la comarca.

La Semana Cultural ofrece un amplio programa de actividades para todos los públicos, mientras que el Concurso Tradicional de Verdiales, declarado Fiesta Singular de Málaga, reúne a más de doce pandas del estilo «montes» que llenan sus calles con los sones de este arte ancestral.

El encanto de Benagalbón reside precisamente en su autenticidad, en un ritmo de vida que parece resistirse al paso del tiempo. Pasear por sus calles, conversar con sus habitantes o simplemente sentarse en una terraza para contemplar el atardecer son experiencias que conectan al visitante con la esencia más genuina de la Axarquía malagueña.

En definitiva, a tan solo unos minutos de las concurridas playas de Rincón de la Victoria, Benagalbón espera ser descubierto por aquellos viajeros que buscan algo más que sol y playa, por quienes desean sumergirse en la historia, la cultura y las tradiciones de un rincón único de la Costa del Sol.

Para conocer más: Benagalbón